"El coronel asesinó al preso; yo asesiné al coronel con mi cámara". Eddie Adams, fotógrafo de guerra, fue el autor de esta instantánea que muestra el asesinato, el 1 de febrero de 1968, por parte del jefe de policía de Saigon, a sangre fría, de un guerrillero del Vietcong, que tenía las manos atadas a la espalda, justo en el mismo instante en que le dispara a quemarropa. Adams, que había sido corresponsal en 13 guerras, obtuvo por esta fotografía un premio Pulitzer, pero le afectó tanto emocionalmente que se reconvirtió en fotógrafo del mundo rosa.
También conocido como el Rebelde Desconocido, este fue el apodo que se atribuyó a un hombre anónimo que se volvió internacionalmente famoso al ser grabado y fotografiado en pie frente a una línea de varios tanques durante la revuelta de la Plaza de Tian'anmen de 1989 en la República Popular China. La foto fue tomada por Jeff Widener, y se transmitió esa misma noche siendo titular en cientos de periódicos, noticieros y revistas de todo el mundo. El hombre se mantuvo solo y en pie mientras los tanques se le aproximaban, sosteniendo dos bolsas similares una en cada mano. Mientras los tanques iban disminuyendo la marcha, él hacía gestos para que se fueran. En respuesta, el tanque situado en cabeza de la columna intentó sortearlo; pero el hombre se interpuso repetidamente en su camino, demostrando una tenacidad y resistencia enormes. En Occidente, las imágenes del rebelde fueron presentadas como un símbolo del movimiento democrático chino. Un joven arriesgando la vida para oponerse a un escuadrón militar. Dentro de China, la imagen fue usada por el gobierno como símbolo del cuidado de los soldados del Ejército Popular de Liberación para proteger al pueblo chino: a pesar de las órdenes de avanzar, el conductor del tanque rechazó hacerlo si eso implicaba dañar a un sólo ciudadano.